El jaguar ha sido un elemento importante en la cultura guatemalteca desde épocas pre-hispánicas, sin embargo actualmente los jaguares guatemaltecos enfrentan serias amenazas a su sobrevivencia. En los últimos 10 años se han realizado importantes avances en el entendimiento del estado de los jaguares en el país y las medidas de manejo para su conservación a largo plazo. En Guatemala se estima que la distribución actual de los jaguares abarca el 58% del territorio, y de ésta el 47.2% se encuentra en área protegida.
La Reserva de Biósfera Maya (RBM) en la región norte de Guatemala constituye el bloque de bosque continuo más extenso del sistema de áreas protegidas de Guatemala, y actualmente es el bastión de conservación de los jaguares en el país, y en la región, ya que potencialmente mantienen el flujo genético con los jaguares mexicanos y beliceños. La mayor parte de la información de jaguares en Guatemala ha sido generada para la Reserva de Biósfera Maya.