Guatemala cuenta con 250 km de costa en el Pacífico, que se extienden a lo largo de seis departamentos y alberga cerca de 300 comunidades en la zona costera. Esta región es una de las más productivas del país, con una gran diversidad de hábitats, como playas arenosas, estuarios, humedales herbáceos, lagunas costeras y manglares.
Estos ecosistemas costeros son fundamentales para mitigar el cambio climático y sirven como áreas clave de alimentación y crianza para especies como tiburones, rayas, mantas y peces, además de ser sitios de anidación para tortugas marinas y rutas migratorias para aves. También alberga hasta 12 especies de mamíferos marinos, como la ballena jorobada, que migra a lo largo del Pacífico Oriental Tropical.
La Costa del Pacífico es hogar de al menos 300,000 personas que dependen directamente de los recursos naturales y de más de dos millones que lo hacen de forma indirecta, siendo la pesca uno de los motores económicos fundamentales para la seguridad alimentaria de la región. Entre las especies de peces óseos más destacadas están el Dorado, el Pargo, el Róbalo, el Pez vela, el Atún y diversas especies demersales. Además, esta zona marino-costera es escenario de actividades productivas como la acuicultura, la agricultura, el turismo, la pesca deportiva y otros servicios recreativos.
A pesar de su importancia, las áreas costero-marinas están poco representadas en el Sistema Guatemalteco de Áreas Protegidas (SIGAP), donde el 32% de las áreas protegidas son predominantemente terrestres. Con el fin de mejorar esta representación, el CONAP ha promovido la Agenda Marina, que inició en 2010, para identificar los “Vacíos de Conservación en el Pacífico”. Este estudio preliminar destacó áreas de alta relevancia biológica que deben formar parte del SIGAP.
Desde 2017, WCS ha colaborado con el CONAP-SIGAP para avanzar en esta agenda, trabajando en conjunto con instituciones de gobierno, comunidades locales, municipalidades, empresas privadas y otros socios para desarrollar estudios técnicos que promueven la declaratoria de áreas de uso múltiple marino-costeras y la creación de una Reserva de Biosfera Marina. A partir de 2019, se han elaborado estudios técnicos para establecer áreas de uso múltiple como Tiquisate-Tecojate y Tulate-Churirin-Chiquistepeque, y actualmente se debaten en el Congreso dos iniciativas de ley que respaldan la creación de las áreas protegidas marino-costeras de Tiquisate-Tecojate y Sipacate-Naranjo.
Los estudios técnicos propuestos se han desarrollado en colaboración con las comunidades locales, y en todos los casos se sugiere la categoría de “Uso Múltiple”, permitiendo opciones de desarrollo sostenible que aseguren el aprovechamiento adecuado de los recursos naturales, fortaleciendo los medios de vida sostenibles y contribuyendo al bienestar de la comunidad. Entre los logros más destacados, se ha avanzado en la elaboración del primer estudio técnico para una zona exclusivamente marina: la Reserva de Biosfera Marina del Pacífico, ubicada entre las 12 y 85 millas náuticas. Esta reserva abarca aproximadamente 22,000 km² y propone una zonificación con áreas de manejo pesquero (47%), zonas de amortiguamiento (13%) y zonas de uso sostenible y conservación (40%). La administración de esta reserva se plantea como un esfuerzo compartido entre el Ministerio de la Defensa Nacional, CONAP y DIPESCA/MAGA.
Desafíos de conservación
La sostenibilidad de las áreas protegidas en la costa del Pacífico requiere un firme compromiso del gobierno de Guatemala para atraer inversiones orientadas a la conservación y el desarrollo sostenible de los recursos marinos y costeros, potenciando así actividades como el turismo y la diversificación económica. Es esencial que haya una estrecha coordinación entre el CONAP, la autoridad pesquera (DIPESCA) y el Ministerio de la Defensa Nacional, de manera que cada institución pueda intervenir según sus competencias.
Es clave trabajar con las autoridades gubernamentales para impulsar esta oportunidad única de establecer áreas protegidas marino-costeras, cumpliendo con las Metas Nacionales como la Política Marítima Nacional, las Contribuciones Nacionalmente Determinadas y el Convenio sobre Diversidad Biológica. Estas iniciativas pueden atraer inversión al país y fomentar el desarrollo sostenible de las comunidades costeras locales.