La demanda global y la competencia por los recursos naturales ha provocado el aumento de las inversiones de la industria de energía y minería, que se espera llegue a las decenas de miles de millones de dólares de aquí al 2030. La magnitud de esta inversión no tiene precedentes y si se maneja de forma inadecuada aumentará la presión sobre los paisaje importantes para la vida silvestre, los cuales proporcionan importantes servicios ecosistémicos. Estas inversiones generan beneficios significativos a las compañías, impuestos, empleos y beneficios económicos a través de las economías donde los proyectos están en marcha. La probabilidad de que los gobiernos renuncien a tales inversiones es baja y por lo tanto, en el largo plazo, WCS debe mejorar sus posibilidades de alcanzar su visión y misión en cada paisaje, mediante la participación en las industrias a nivel mundial y nacional. Trabajando con los gobiernos para promover las mejores prácticas se busca el equilibrio entre las presiones de desarrollo y las necesidades de conservación.
Sin embargo, la lucha por los recursos naturales es probable que se produzca no sólo a escala industrial. La explotación artesanal de los recursos como el oro y otros metales, así como inversiones a pequeña escala en el desarrollo de la energía también tendrá un impacto significativo en las presiones sobre los paisajes. WCS tendrán que desarrollar estrategias eficaces para hacer frente a la amenaza artesanal, trabajando con los gobiernos y las instituciones comunitarias para desarrollar soluciones efectivas para la extracción de recursos.